Cultura, historia, gastronomía, vida nocturna. Tesalónica ofrece experiencias únicas y revela sus secretos.
Una ciudad con una historia fascinante. Lo encontrarás a cada paso: iglesias bizantinas, castillos, mezquitas, maravillas arquitectónicas que dan testimonio del rico pasado multicultural de la ciudad. Pero, ¿cuáles son las atracciones en Tesalónica que debes incluir en la lista de cosas por hacer en tu viaje?
Los "diamantes" arquitectónicos de la ciudad
No lo pases por alto, toma nota de los magníficos monumentos arquitectónicos de Tesalónica y búscalos; la mansión Tyroloi en el antiguo paseo marítimo, el edificio Mandalideio, la mansión Exarhopoulos, el antiguo restaurante Olympos Naoussa y el edificio del YMCA construido en 1924. En el centro de la ciudad, asegúrate de visitar la antigua torre del reloj, la Iglesia Católica, el edificio que alberga el Conservatorio Estatal, la Plaza de la Corte de Justicia, el gran reloj de sol en la acera de Tsimiski, los edificios Biliris y Alexiadis de 1922. Otras visitas obligadas incluyen la Sala de Conciertos de Tesalónica, el Teatro Real que fue construido en 1940 por el arquitecto Constantine Doxiadis y el Teatro Jardín, ejemplos de arquitectura de una ciudad que conoce el significado de la belleza.
El esplendor de Bizancio
Cuando vengas a Tesalónica, visitar sus iglesias bizantinas debe estar en el primer lugar de tu lista. Agia Sofía, construida a finales del siglo VII con su hermoso atrio, es una de las atracciones más impresionantes de Tesalónica, al igual que la Iglesia de la Acheiropoietos, construida en el siglo V sobre las ruinas de los baños romanos, para convertirse en un Mezquita musulmana en el año 1320 después de que Tesalónica se rindió a los otomanos. Y no te olvides de Panagia Halkeon, que se construyó en 1028 y se transformó en mezquita en 1430.
Viaje a la ciudad vieja (Ano Poli)
Es muy fácil viajar al pasado solo con subir a la Ciudad Vieja (Ano Poli). Observa las casas de refugiados, los patios con macetas, los tendederos, los caminos de piedra, las iglesias bizantinas, los castillos y murallas. Contempla la puesta de sol desde la Torre Trigonio, una de las experiencias más emocionantes que tendrás en Tesalónica, no dejes de visitar el castillo de Gedi Koule para ver algunas exhibiciones interesantes. Las iglesias bizantinas de Agios Nikolaos tou Orfanou y Osios David tienen una rica historia y exquisitos murales, vale la pena visitarlas durante tu viaje al norte de Grecia. Como lo es también el Monasterio de Vlatadon con su espectacular atrio.
Los Jardines de Pasha
Si entrecierras los ojos, pensarás que el excéntrico arquitecto Gaudí pasó por estos lados. Motivos art nouveau dominan las fuentes ornamentales y galerías a lo largo de los Jardines de Pasha. Fueron creados por judíos sefardíes en el año 1904. Su historia es desconocida y misteriosa y sucumbirás a su ambiente místico.
Los viejos mercados de Tesalónica
Cazadores de ofertas, vendedores ruidosos y puestos colmados; el mercado de Kapani (Vlali) es el más antiguo de Tesalónica. Bajando desde la calle Egnatia hacia el mar, después de la avenida Ermou, encontrarás el mercado Modiano cubierto, con tiendas y bares con música en vivo. En Athonos, entre las docenas de tabernas, hay fruterías y tiendas que venden especias, muebles hechos a mano, joyería y ropa.
Mercado Bezesteni
Este hermoso mercado cubierto ha sido el centro del comercio en Tesalónica durante siglos. El impresionante edificio rectangular tiene cuatro entradas y seis cúpulas cubiertas de plomo y fue construido por el Sultán Voyiazit en el siglo XV.
Los almacenes en el puerto
Los viejos almacenes en el puerto de Tesalónica, construidos en 1910 y diseñados por el arquitecto Eli Modiano, es el centro cultural más activo de la ciudad. Fueron restaurados en el año 1997 y hoy albergan el Museo de Fotografía, el Museo del Cine, el Centro de Arte Contemporáneo, además de restaurantes y bares. En noviembre, los aficionados al cine de todo el mundo se reúnen aquí para asistir al Festival Internacional de Cine de Tesalónica.
Boat bars
El corazón de la vida nocturna de Tesalónica late aquí. Son las 3 de la mañana, justo para saltar a bordo a una de las "barras de barco", o barras flotantes, que suben y bajan por el Golfo Termaico. ¡La noche todavía es joven!
