El Ática

El Ática es sinónimo de Atenas, una de las ciudades más importantes del mundo a nivel histórico y, a la vez, una metrópoli moderna y llena de vida. Pero su magia sobrepasa los límites del centro, cubriendo la península del Ática hasta llegar al cabo de Sunión. Su costa está llena de playas, puertos deportivos, complejos turísticos cinco estrellas y hoteles de menor tamaño, acompañados de docenas de restaurantes y bares junto al mar. Y no olvidemos las islas cercanas a Atenas, ni tampoco a Citera, situada justo al sur del Peloponeso.

La riqueza histórica y cultural de Atenas, combinada con el ambiente moderno y juvenil, la convierten en un destino ideal para escapadas urbanas. Por un lado, tienes la icónica Acrópolis con su museo de fama mundial, el antiguo Ágora, Plaka y el centro histórico. Y por otro, los restaurantes de alta gama, las cafeterías, las tiendas, los mercados pintorescos, las galerías con exposiciones contemporáneas y las tiendas de arte y antigüedades.

Entonces, no importa si estás aquí para disfrutar de una escapada urbana, o, si en cambio, buscas complementar tus largas vacaciones en Grecia. En cualquiera de estos escenarios, el Ática llenará todas tus expectativas.

Las hermosas playas del Ática y el golfo Sarónico

La Riviera de Atenas se extiende a lo largo de la costa sur del Ática, desde Falero (al norte de El Pireo) hasta Sunión en la península sureste. Muchas de sus playas están organizadas con tumbonas, sombrillas y animados bares de playa y restaurantes costeros. Asimismo, hay docenas de opciones para comer, incluidas tabernas junto al mar que sirven mariscos frescos. Verás que la vida aquí transcurre al ritmo del verano durante todo el año.

Cuando visites Sunión, te quedarás boquiabierto ante la imponencia del templo de Poseidón, especialmente durante las energizantes puestas de sol. Entretanto, las gemas flotantes de fácil acceso del golfo Sarónico, con sus playas de arena, son perfectas para un viaje de un día o una escapada de fin de semana. Desde el puerto de El Pireo, toma el hidroala o ferri hacia Egina, Poros, Hidra o Spetses. Citera, por su parte, exigirá unos días más de tu itinerario, ya que es necesario desplazarse hasta el sur del Peloponeso para llegar a ella. No obstante, vale la pena aventurarse a descubrir esta incomparable isla (que administrativamente pertenece al Ática), donde encontrarás castillos, cuevas sagradas, calas pintorescas, pueblos y playas para todos los gustos.

La cultura brota a borbotones

Atenas es un museo al aire libre. La Acrópolis y el Museo de la Acrópolis (considerado como uno de los mejores del mundo) son paradas obligadas. Al pasear por la pasarela peatonal de Dionysiou Areopagitou y a través de los distritos de Anafiotika y Monastiraki a la sombra de la Acrópolis, admirarás los sitios arqueológicos, los monumentos bizantinos y de la Antigua Grecia, así como las iglesias y los edificios neoclásicos llenos de historia.

Museos como el Museo Arqueológico Nacional en la avenida Patission, los Museos de Arte Popular Griego e Instrumentos Musicales, el Museo de la Guerra, el nuevo Museo Benaki en la calle Pireos, el viejo Museo Benaki en Kolonaki, el Museo Numismático y el Museo de Arte Cicládico enriquecerán tu conocimiento sobre Atenas y su historia, al igual que lo harán la Galería Nacional, el Planetario, la Fundación del Mundo Helénico y las docenas de galerías de arte en el centro de la ciudad.

Una travesía por la costa

La mejor manera de conocer la Riviera de Atenas y las islas del golfo Sarónico es navegando por sus aguas. Encontrarás puertos deportivos para atracar tu yate en Zea, Flisvos (con un aire a Mónaco), Falero, Alimos, Glyfada, Vouliagmeni y en todas las islas cercanas. Si eres un amante de los deportes acuáticos, dirígete a Vouliagmeni y a las playas organizadas de Varkiza y Anavysos, en donde las condiciones son a menudo ideales para la práctica de windsurf y kitesurf. Entretanto, el agua tibia del lago Vouliagmeni es conocida por sus propiedades terapéuticas. Y, por si fuera poco, la costa cuenta además con caminos pavimentados que son perfectos para hacer caminatas y montar en bicicleta.

Las mil y una opciones gourmet

Las opciones para cenar en Atenas son infinitas y varían según el vecindario. En Atenas y los suburbios, encontrarás ouzerias y mezedopolias, que sirven deliciosos platos pequeños, y, por supuesto, tabernas y restaurantes locales que ofrecen cocina tradicional griega, a menudo acompañada de música en vivo. La ciudad también tiene varias cervecerías y bares de vinos, así como café-restaurantes que abren todo el día.

Atenas ofrece cocinas de todo el mundo: francesa, italiana, india, china, japonesa, mexicana y tapas, incluyendo restaurantes especializados en comida vegetariana y vegana. Encontrarás bodegas con vinos de toda Grecia y el mundo. Y si te diriges hacia los suburbios del sur, hallarás tabernas junto al mar que sirven mariscos recién capturados, maridados siempre con un buen ouzo y vinos exquisitos. En las islas del golfo Sarónico los mariscos son la especialidad, mientras que en Egina la comida en el pintoresco puerto de Perdika es particularmente notable. Y en Spetses, no te pierdas la oportunidad conocer los restaurantes que bordean el puerto viejo.

Los sitios de interés más populares

• La Acrópolis: es la piedra angular de la civilización europea y un recordatorio de lo que la humanidad es capaz de hacer. Aprenderás sobre las creaciones atemporales de la Edad de Oro de Atenas, incluidos algunos de los monumentos más famosos del mundo: el Partenón, los Propileos, el Templo de Atenea Niké y el Erecteion con sus famosas Cariátides. Si quieres obtener una imagen más completa, visita otros monumentos atenienses de gran importancia, tales como el Teatro de Dioniso, el Odeón de Herodes Ático, el Areópago, la colina Pnyx, el antiguo cementerio de Kerameikos, el antiguo Ágora, el foro romano... La lista continúa.
• El centro histórico: pasea desde la plaza Síntagma a lo largo de la famosa calle comercial de Ermou hasta llegar a Monastiraki, y luego entra en los antiguos mercados, donde encontrarás tiendas de recuerdos y antigüedades. La plaza Avissinias, con su mercado de pulgas, es particularmente pintoresca. Y no olvides pasar por las avenidas Stadiou y Panepistimiou, donde te esperan edificios emblemáticos, cafés históricos y todo tipo de restaurantes y tiendas.
• Kolonaki: este barrio aristocrático del centro de Atenas ofrece una amplia gama de opciones, entre las que destacan las cafeterías elegantes, los restaurantes de alta gama y las geniales boutiques. 
• Plaka: disfruta de un inigualable recorrido a través de las plazas y calles sombreadas de Plaka, desde la calle Adrianou hasta Anafiotika, un barrio ateniense de arquitectura cicládica.
• Psyrri y Gazi: los barrios de Psyrri y Gazi son lugares de moda donde encontrarás una plétora de restaurantes, cafeterías y bares cargados de energía juvenil.
• La costa: camina por la costa del Ática, especialmente alrededor de Glyfada, un elegante suburbio sureño con bares de moda, excelentes restaurantes y una vibrante zona de compras. Está situado al final de la línea de tranvía que comienza en Síntagma y corre lo largo de la hermosa costa.
• Islas del golfo Sarónico: en estas islas cercanas a Atenas serás recibido por una atmósfera completamente diferente. Visitarás las mansiones y casas señoriales de capitanes del siglo XVIII en Hidra, el pintoresco puerto viejo de la cosmopolita Spetses, los edificios kapodistríacos y las tiendas flotantes de comestibles en Egina, la majestuosa isla de Poros y la pequeña y cubierta de pinos Agistri.
• Citera: un poco más alejada se encuentra Citera, donde un imponente castillo veneciano se eleva sobre la Hora, dominando el bonito pueblo costero de Kapsali y sus bahías gemelas. Te recomendamos visitar el castillo veneciano de menor tamaño en Mylopotamos, así como la capilla-cueva de Agia Sophia, donde podrás admirar sus frescos dispuestos entre las estalactitas..