La Volos de hoy se alza sobre lo que otrora fue la antigua Yolco, la ciudad de los argonautas. Situada a los pies del monte Pelión, esta acogedora y encantadora ciudad abraza al golfo Pagasético. Sus tradiciones culinarias, como los tsipouradiko (restaurantes que sirven meze acompañado de aguardiente producido localmente) se roban el espectáculo. Los barrios antiguos se yuxtaponen a la energía juvenil de los estudiantes, quienes pasean por las calles y se reúnen en las pastelerías y cafés. Los edificios industriales, los museos, las tiendas y los espacios de exhibición enriquecen el ambiente, pero el paseo marítimo es, sin duda alguna, la atracción principal. Volos es una ciudad costera que rezuma belleza, libertad y vida, tanto de día como de noche.
Como toda buena anfitriona, ¡la acogedora Volos te dará la bienvenida con tsipouro (una especie de aguardiente) y meze! Los viajeros que van camino a Pelión, los estudiantes, los marineros que surcan el mar Egeo, los hombres y mujeres en viaje de negocios... no hay nadie que pase por aquí que no entre a un tsipouradiko. Hay uno en cada esquina y el paseo marítimo está lleno de ellos.
A la hora del almuerzo se llenan de comensales y tú también puedes formar parte del ritual. Spetzofai (salchichas con pimientos), alcachofas silvestres, sepias con hinojo silvestre... son más de 40 los mini platos tradicionales que podrían llegar a tu mesa de la mano de la bebida local, servida en botellas individuales de 25 ml. Es una institución culinaria que se remonta a la década de 1930.
El paseo marítimo de Volos —uno de los más encantadores de Grecia— es el punto de reunión de lugareños y visitantes. Comienza tu recorrido en la escultura de Argo, el símbolo de la ciudad, y continúa hasta llegar a las esculturas al aire libre del imponente edificio Papastratou. Relájate con una buena taza de café mientras observas las olas, pasea en bicicleta, disfruta de un cóctel mientras admiras el edificio neoclásico del Banco Nacional de Grecia y el teatro Achilleion. Y por último, vuélvete uno con el mar caminando por el paseo Kordoni.
Las calles empedradas de Ermou, Kontaratou y Ogl y la plaza Agios Nikolaos están llenas de vida, tanto de día como de noche. Los cafés, los cócteles, la comida y la estruendosa música en vivo harán que te muevas al ritmo de la ciudad.
Los viejos edificios industriales de Volos (52 en total) han adquirido una nueva identidad. Las fábricas de cerámica y tabaco, las herrerías y los molinos de harina han sido reconvertidos en salas de cine y restaurantes. Tsalapatos es uno de los ejemplos más representativos de la arquitectura industrial en Europa.
Descubre estos importantes asentamientos prehistóricos, a tiro de piedra de Volos. Son las atracciones más interesantes de la zona.
Esta estación de ferrocarril es una obra maestra de la arquitectura. Fue diseñada por Evaristo de Chirico (padre del famoso pintor Giorgio de Chirico), quien también construyó la línea de ferrocarril Moutzouris en Pelión.
A pocos kilómetros de Volos, los centros turísticos costeros del golfo Pagasético, como Agria, Kato Gatzea y Kala Nera, te invitan a disfrutar de una taza de café o de un vaso de tsipouro.