Naturaleza

Lagos alpinos, gargantas imponentes, humedales tranquilos, parques nacionales y bosques de montaña... cuando se trata de explorar la naturaleza en Grecia, siempre hay algo por descubrir en cualquier parte del país y en cualquier época del año

En Grecia, un manto de paisajes de belleza increíble y variada biodiversidad se despliega ante tus ojos: parques nacionales, cascades, ríos, lagos, humedales, cordilleras e incluso calderas volcánicas en Santorini, Nísiros y Milo. Pronto descubrirás cuánta diversidad puede mostrarte un país tan pequeño. El clima templado y el ambiente natural son ideales para la conducción off-road y para la práctica de senderismo, rafting, kayak, escalada, equitación e incluso barranquismo (si te atreves).

En el país, más de 4.000 zonas están bajo la protección de la Red Natura 2000. Asimismo, Grecia cuenta con cuatro Geoparques que forman parte de la Red de Geoparques Europeos: Lesbos y su bosque petrificado, el Parque Natural de Psiloritis en Creta, el Parque Nacional de Chelmos-Vouraikos en el Peloponeso y el Parque Nacional Vikos-Aoos en la región Zagori en el Épiro.

El país de las maravillas acuáticas

Los 400 humedales de Grecia son verdaderamente pintorescos. Muchos de ellos están protegidos por el Convenio de Ramsar debido a la gran cantidad de aves migratorias y residentes que allí habitan. En Mesolongi, Gialova, Porto Lagos y el Golfo de Arta encontrarás lagunas maravillosas, al igual que en el bosque de Strofilia y en los deltas de muchos ríos (Vardar, Mesta, Maritsa, Aspropótamos y Árachthos). Por otro lado, los lagos de Kerkini, Vistonis, Vegorotis, Mikri Prespa (pequeño lago Prespa), Koronia y Volvi son de ver para creer. Todos y cada uno de ellos ofrecen un mundo lleno de vegetación, así como un hogar para innumerables animales y plantas.

Al menos 446 especies de aves —muchas de las cuales están en peligro de extinción— viven o pasan tiempo en los preciosos humedales y demás ecosistemas de las islas y la Grecia continental.

Si la observación de aves es lo tuyo, debes dirigirte al bosque de Dadia, los deltas de los ríos Maritsa y Peneo, el monte Olimpo, la laguna Gialova y los lagos Kerkini, Heimaditis y Zazari.

Ecoturismo en Grecia

Grecia, el país con el undécimo litoral más largo del mundo, cuyo relieve consta en un 80% de montañas, no podría ser otra cosa que un tesoro para los amantes de la naturaleza. Ahora añade a eso los tradicionales pueblos de montaña, con su arquitectura y costumbres particulares que se remontan siglos atrás y que te dan la bienvenida a lugares como Pelión, Zagori, Meteora, el monte Olimpo, el Pindo, Ródope, Arcadia, Mesenia, Nafpaktía… o aún mejor, el espectacular paisaje de las montañas de Grecia: el Olimpo, el Taigeto y el Parnón, y entre ellas, por supuesto, el Psiloritis (Monte Ida) y las alucinantes gargantas de las Montañas Blancas de Creta.

Las rutas de senderismo y los caminos forestales te llevarán a lagos, ríos y aguas termales, rodeados de bosques, cascadas y valles, así como también de templos antiguos y castillos medievales que añaden toques naturales e históricos al paisaje.

Explorando las rutas de senderismo del monte Olimpo

Turismo rural en Grecia

Para completar la experiencia, los lugareños te ofrecerán las especialidades de su región, una copa de vino, un vaso de raki o algo dulce en las tabernas. También puedes visitar una granja o viñedo familiar, o participar en el ordeño de animales, el proceso de elaboración de quesos y la recolección de aceitunas.

Alternativamente, podrías recoger frutas y verduras del campo y preparar un almuerzo frío, o tal vez te animes a formar parte de la vendimia y ayudar en la producción de vino y raki. Una vez que la jornada de trabajo haya terminado, empápate de las tradiciones más puras de la región en alguna de las fiestas del pueblo. Y por último, no olvides llevar a casa un recuerdo, ya sea una botella de miel, un frasco de mermelada o un manojo de hierbas, cuyos aromas y sabores te transportarán de regreso a Grecia cada vez que añores volver.