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El Dodecaneso: un archipiélago que debe ser recorrido isla por isla

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HORA DE LEER
Mientras comes una ensalada Griega

Desde Rodas y Cos hasta los menos conocidos Kárpatos, Astipalea, Leros y Patmos 

Iniciar el proceso de descubrimiento durante las vacaciones es solo cuestión de dar un paso. Pero, ¿qué pasaría si ese paso se convierte en un paseo? ¿Y luego en todo un recorrido? Bienvenido al Dodecaneso, un archipiélago de islas mágicas en el sur del Egeo que debe ser recorrido isla por isla. Seguramente habrás oído hablar de algunas de ellas (Rodas y Cos, muy probablemente), pero hay otras que son igual de ricas en historia y belleza natural aunque menos conocidas y, ciertamente, menos concurridas.

Viaja a través del tiempo en Rodas

Nuestro viaje de isla en isla comienza en Rodas. Ahora bien, depende de ti decidir si el viaje será hacia el pasado o el futuro, ya que Rodas tiene la capacidad de llevarte fácilmente en ambas direcciones.   

Las murallas del casco antiguo —declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO hace 30 años— te transportan instantáneamente a un mundo de caballeros medievales. Los monumentos con los nombres más ostentosos, entre ellos el Palacio del Gran Maestre de los Caballeros de Rodas, cobran vida con sus adoquines y escudos de armas. O tal te dirijas a Lindos, en la costa oriental, donde una elevada acrópolis ofrece vistas panorámicas, no solo del Egeo, sino de un paisaje que contiene 2.400 años de historia griega, veneciana, bizantina y otomana.

Pero Rodas también puede llevarte hacia el futuro. Los hoteles y servicios modernos, al igual que sus instalaciones de viaje, dan testimonio de su estatus como la más grande de las islas del Dodecaneso. Bueno… ha llegado el momento de partir, así que nos vamos al puerto o al aeropuerto.

Tu puerta de entrada al Dodecaneso

El impactante golpe de efecto de Kárpatos

A solo 40 minutos de Rodas en avión, pero a un mundo de distancia en términos de renombre internacional, yace Kárpatos, una isla de extremos. Pocas islas logran causar tanto impacto como ella. Por un lado está Olimpo, un pueblo cuyas casas emplazadas en las laderas de las montañas caen cual cascadas hacia el mar, acompañadas de formaciones rocosas que desafían la gravedad y atraen a los escaladores desde la distancia. Pero, por el otro, están las calas tranquilas y las playas bañadas por el sol que adornan una costa de ensueño. No es raro encontrar isleños con vestimenta tradicional, particularmente en alguno de los festivales más concurridos. Al fin y al cabo, esta isla aún mantiene intacta su identidad.

Un toque teatral

Boat trips to the island of Saria, an island of wild beauty, listed as a Natura 2000 area

Cos, un festín para los sentidos

Antes de pasar a las gemas más pequeñas del Dodecaneso, haremos una parada rápida. Ningún recorrido de isla en isla por la región estaría completo sin una visita a Cos. Gracias a su aeropuerto y a sus excelentes rutas en ferri, Cos ofrece múltiples conexiones con sus vecinas y, por supuesto, es un maravilloso destino en sí mismo. Por algo Hipócrates se estableció en esta isla. El padre de la medicina moderna es sinónimo de Cos, después de haber fundado su Asclepeion aquí (una colección de enfermerías, templos y aguas termales, la versión del mundo antiguo de un spa de curación holístico). Además, Cos es un duro contendiente en la sana competencia entre las islas del Dodecaneso en lo que respecta a cultura (antigua o medieval, la elección es solo tuya). Incluso hay algo de italiano en la arquitectura de la ciudad principal. Todo un festín para los sentidos.

Que comience el festín

La luz mágica de Astipalea

Desde Rodas o Cos, un abanico de opciones se presenta ante ti. Y cuando tienes tantas opciones, sería un error no disfrutar de ellas. Las razones para visitar Astipalea simplemente se salen de la página. Las casas encaladas y el castillo en lo más alto de la ciudad principal no son solo una imagen perfecta, sino que desde aquí las vistas del Egeo hacen que tu corazón lata un poco más rápido. En cuanto a las playas, si buscas un ambiente puro y tranquilo para tus vacaciones en familia, este es el lugar para ti. Vatses, Livadi, Steno, Psili Ammos y, sin duda, Kaminakia... cada una de ellas son playas que llegarás a conocer a la perfección. Y en cuanto a la comida: quesos, miel, galletas de Pascua aromatizadas con tomillo y otras delicias locales... solo pruébalas. Pero si hay algo que querrás arrebatarle a Astipalea es su luz, un blanco iridiscente que llena el alma.

Haz que tu corazón lata un poco más rápido

Koutsomytis beach, the most beautiful in Astypalaia, Dodecanese

Leros: la autenticidad en su máxima expresión

A poco más de 1 hora y 20 minutos de Rodas o Cos, este pequeño refugio de autenticidad ha resistido todo lo que sus invasores le han arrojado, saliendo airosa y viéndose más hermosa que nunca. Los monasterios y pueblos se han fusionado a tal punto con su entorno natural que sus historias parecen ser llevadas por la brisa veraniega y el aroma a hierbas. Mientras tanto, los edificios neoclásicos de la capital, Plátanos, y las casas de color ocre de Agia Marina ofrecen elementos arquitectónicos distintivos que le dan a Leros un estilo propio. No es de extrañar que fuera elegida por la diosa Artemisa como el lugar para construir su trono. Si hay una vista de la que nunca te cansarías, es esta.

Un estilo propio

Patmos: el secreto mejor guardado de los que saben

Por último, pero no menos importante... nuestra aventura por las islas del Dodecaneso concluye en Patmos. Ubicada a un par de horas en barco desde Cos (y a solo 1 hora y 20 minutos desde Leros), este es un viaje que te lleva a otro plano existencial. Patmos ha sido el secreto mejor guardado de los que saben por el tiempo suficiente como para haberle dado un nivel elevado de arquitectura y comodidad. Pero la isla también ha logrado conservar todo su misticismo y tranquilidad. Ninguna descripción de Patmos estaría completa sin un vistazo a la cueva en la que se dice que San Juan el Divino escribió el Libro del Apocalipsis... pero no nos vayamos por las ramas: no menos divina es la experiencia de probar la famosa gastronomía de la isla. Al fin y al cabo, lo celestial viene en muchas formas.

La isla de las revelaciones

Picture-perfect Hora

El Dodecaneso

Una serie de historias unidas por el amor al mar

Pues, esto ha sido todo. Seis islas y tantas idas y vueltas como tu corazón lo desee. No hay nada que te impida visitar otras islas del Dodecaneso (Kálimnos, Kastelórizo, Jalki, Lipsí, Nísiros y Symi), pero lo importante es que ya sabes de qué trata todo esto. Cada isla es tan versátil y variada que merece un capítulo entero en tu agenda de vacaciones... pero no te conformes con eso y dedícale un libro entero a tu travesía por el Dodecaneso.

Una docena de hermosas islas

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